Queridos Franciscanos de María, la palabra de vida de esta semana nos invita a no tirar la toalla en la lucha por la santidad en nosotros y en los demás. Nos invita, además, a hacerlo siguiendo el método empleado por Jesús: el de la Misericordia - que no hay que confundir con la tolerancia que utiliza el mundo y que nos quiere obligar a utilizar.
La Misericordia de Dios hacia Zaqueo fue lo que le llevó a este a la conversión. Claro que para eso fue necesario que Zaqueo fuera conciente de que Jesús estaba haciendo un enorme sacrificio y corriendo un gran riesgo al ir a comer a su casa. Es decir, la conciencia que Zaqueo tenia de su pequeñez, de su pecado, fue lo que le ayudó a valorar en su justa medida la acción de Cristo y de ahi a la conversión sólo hay un paso. "Se empieza , pues, por la HUMILDAD y se termina con el AGRADECIMIENTO sin humildad, dificilmente hay gratitud", pues siempre nos parecerá que lo que nos den, por mucho que sea y por mucho que le cueste a quien nos lo da, es poco para lo que nosotros meecemos.
Empecemos, pues, también nosotros por la humildad. Al reconocernos pecadores valoramos más la misericordia Divina y queremos amarle más y dejar cuanto anes nuestras imperfecciones. Insistamos en la contemplación de nuestros defectos y sobre todo en la contemplación del Amor de Dios, siguiendo aquello que nos enseña San Agustín cuando le pedía al Señor: "Haz que yo me conozca y que yo te conozca". Que yo me conozca, Señor, que me dé cuenta de cuales son mis límites y mis pecados, y que yo te conozca y me dé cada vez más cuenta de lo mucho que me Quieres.
En cuanto a los demás, intentemos hacer lo m ismo: insistir en la Misericordia, siendo testigos del Amor Misericordioso de Dios hacia ellos con nuestro comportamiento. Pero, a la vez, con delicadez y oportunidad, intentar ayudarles a que comprendan que no son dioses, que lo que recién es en muchos casos un don, que tienen que agradecer por ese Amor que reciben. Sólo cuando se dan cuenta de que están siendo amados gratuitamente, sin merecerlo, haran como Zaqueo y dejaran al Señor que entre en su casa y Reine.
En cuanto al "tema de meditación", nos fijamos en esa letanía con la que llamamos a María "Torre de David". Recordamos así la fidelidad de la Virgen a sus raíces y debemos meditar en, si nosotros estamos haciendo lo mismo: ser fieles a las raíces Cristianas de nuestro pueblo, al ejemplo que nos dejaron nuestros mártires, y también a las raíces más proximas, "a la de nuestra familia", al ejemplo que nos dejaron nuetros padres.
Estoy en Medellín, Colombia, para comenzar mañana Sábao el Congreso de los Franciscanos de María Colombianos. Hoy estube en Pereira, una preciosa ciudad rodeada de cafetales, en el corazón de este país. Había 1200 personas en la Iglesia para la conferencia sobre el agradecimiento, a pesar de que he llegado con 4 horas de retraso porque anularon el vuelo que debía tomar en Bogotá. El cariño que he recibido ha superado el mucho que suelo recibir en otros sitios, hasta el punto de emocionarme. Me he encontrado con gente hambrienta de Dios y ahora hay que pedir que esto no se desinfle y se quede en una emosión intensa pero pasajera. Os pido oraciones para el congreso que empiezo mañana y también para el programa que desarrollaré a partir del Martes en Venezuela. Después de tantas semanas de trotar, estoy muy cansado, y necesito vuestro apoyo para ser fiel hasat el final.
Que Dios os bendiga.
P.Santiago.
FELICIDADES PADRE. DIOS LE BENDICE. SE QUE TOCARA MUCHAS MAS ALMAS CON SUS HERMOSAS PALABRAS. UN ABRAZO.
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